
El gobierno del presidente Gustavo Petro enfrenta una crisis sin precedentes. En menos de 48 horas, cuatro altos funcionarios han presentado su renuncia tras un Consejo de Ministros televisado que evidenció profundas fracturas internas en la administración.
El primero en dimitir fue Jorge Rojas, director del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), quien apenas llevaba una semana en el cargo. Le siguió Paula Robledo Silva, secretaria Jurídica de la Presidencia, quien consideró que los recientes acontecimientos ameritaban una reconfiguración del Gobierno.
Posteriormente, Juan David Correa, ministro de Cultura, presentó su renuncia tras 18 meses en el cargo. Finalmente, Carlos Carrillo, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), también presentó su renuncia protocolaria, afirmando: «Creo que es menester de todo el Gabinete y de todo el alto gobierno presentar sin demora la renuncia protocolaria».
Estas renuncias se producen en medio de tensiones internas exacerbadas por el nombramiento de Armando Benedetti como jefe de despacho de la Presidencia, una decisión que ha generado divisiones dentro del gabinete y críticas por parte de figuras clave del gobierno. La situación se agrava con la propuesta del ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, quien instó a todo el gabinete a presentar su renuncia protocolaria para que el presidente Petro realice los cambios que considere necesarios.
Analistas advierten que esta crisis podría afectar la estabilidad del gobierno y dificultar la implementación de sus reformas clave. La incertidumbre sobre el rumbo del país aumenta a medida que el gabinete se desmorona y las fracturas internas salen a la luz.