
El juicio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez sigue avanzando en medio de una fuerte controversia. Durante la segunda jornada de audiencias, su abogado defensor, Jaime Granados, presentó una recusación contra la jueza 44 Penal del Circuito de Bogotá, Sandra Liliana Heredia, alegando falta de imparcialidad en el proceso. Sin embargo, la magistrada rechazó la solicitud al considerar que no se sustentó adecuadamente la causal de recusación.
En la audiencia, Uribe expuso su versión de los hechos durante casi dos horas, reiterando su inocencia y asegurando que el caso en su contra tiene un trasfondo político. “No soborné, ni mandé a sobornar testigos, no engañé a la justicia. En este juicio probaremos que su origen ha sido político”, afirmó el exmandatario en su intervención.
Tras el intento fallido de la defensa por apartar a la jueza del caso, la Fiscalía llamó a su primer testigo: el senador Iván Cepeda. Durante su declaración, el congresista explicó que sus visitas a las cárceles siempre contaron con la autorización del Congreso y negó haber ofrecido beneficios a los reclusos entrevistados.
Cepeda también relató su encuentro con el exparamilitar Pablo Hernán Sierra, quien le aseguró que en los años 90 participó en la creación de grupos paramilitares en Antioquia, incluyendo el Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Según el testimonio, dicha organización habría surgido en la hacienda Guacharacas, propiedad de los hermanos Álvaro y Santiago Uribe Vélez en ese entonces.
Este juicio, en el que Uribe enfrenta cargos por soborno en actuación penal y fraude procesal, ha sufrido múltiples aplazamientos. La controversia más reciente gira en torno a la decisión del Tribunal Superior de Bogotá de admitir como pruebas interceptaciones telefónicas entre Uribe y su abogado Diego Cadena, una medida que ha generado reacciones divididas.
El proceso continuará el próximo 23 de febrero de 2025, fecha en la que la Fiscalía presentará más testigos y pruebas para sustentar su acusación. Entretanto, la defensa del expresidente insiste en que el juicio carece de garantías y continuará buscando estrategias legales para revertir las decisiones en su contra.