«El cementerio del olvido», así fue denominado por Didian Villegas, edil de la comuna 7 de Ibagué, un histórico camposanto ubicado en el sector de El Salado, que hoy enfrenta un preocupante estado de abandono. Este espacio, con más de 100 años de historia, se ha convertido en el epicentro de la inseguridad y el consumo de estupefacientes, generando alarma entre los residentes del sector.
Villegas denunció la negligencia de las autoridades, afirmando que no hay «dolientes» que se encarguen de recuperar y preservar este patrimonio, vital para la comunidad. «Este sitio, que llamamos el cementerio olvidado, es un patrimonio de nuestra comunidad. Muchas familias reconocidas de El Salado tienen aquí enterrados a sus seres queridos. Sin embargo, lo que vemos es un lugar invadido por personas que vienen a hacer cosas mal hechas, incluyendo brujerías y consumo de drogas», expresó el edil.
Las recientes imágenes del cementerio de El Salado muestran un panorama desolador, con tumbas en mal estado, vegetación descuidada y señales claras del uso del lugar para prácticas ilícitas, como el consumo de alucinógenos y actos de santería. La comunidad de El Salado exige una intervención urgente de las autoridades locales para recuperar este espacio sagrado y devolver la tranquilidad a los habitantes de la zona.
La situación del cementerio refleja una problemática mayor en Ibagué, donde la falta de mantenimiento de los espacios públicos está generando focos de inseguridad y deterioro social. La denuncia de Villegas busca no solo alertar sobre la situación del cementerio de El Salado, sino también promover un esfuerzo conjunto para rescatar este y otros lugares históricos de la ciudad, garantizando su conservación y respeto.
