El ministro de Hacienda y Crédito Público, Ricardo Bonilla, anunció que el gobierno colombiano presentará una propuesta de aumento del 6,2% para el salario mínimo en 2025, en línea con las expectativas inflacionarias para el cierre del año y los indicadores de productividad. El anuncio fue realizado durante su participación en el Congreso de Asofiduciarias, donde destacó que esta cifra refleja un equilibrio entre las necesidades de los trabajadores y la capacidad de las empresas para absorber costos.
Bonilla explicó que la inflación acumulada para noviembre de 2024 se estima en un 5,2%, y al sumarle el punto de productividad, se justifica el incremento propuesto. Además, enfatizó que este aumento no superará el 10%, manteniéndose dentro de los márgenes históricos de ajuste. “Por más que haya algún ajuste, nunca podrá estar en doble dígito”, afirmó, subrayando que el gobierno busca evitar un impacto negativo en la economía nacional.
Impacto en trabajadores y empresas
El incremento del salario mínimo beneficiará a millones de trabajadores colombianos que dependen de este ingreso para cubrir sus necesidades básicas, especialmente en un contexto de recuperación económica. Sin embargo, el sector empresarial podría enfrentar retos relacionados con el aumento de los costos laborales, especialmente en las pequeñas y medianas empresas (pymes), que representan un sector clave de la economía colombiana.
Expertos señalan que un ajuste moderado como el propuesto ayuda a proteger el poder adquisitivo de los trabajadores sin generar un efecto inflacionario significativo ni poner en riesgo la sostenibilidad empresarial.
La propuesta será objeto de discusión en la Comisión de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, en la que participarán representantes del gobierno, empresarios y sindicatos, quienes buscarán llegar a un consenso antes del 15 de diciembre.
