En una rueda de prensa junto a autoridades militares y policiales, se advirtió sobre el aumento de extorsiones en municipios del norte y sur del Tolima, donde los habitantes han reportado presiones económicas y amenazas por parte de grupos delincuenciales.
Según las denuncias, en algunas veredas los delincuentes exigen hasta $13 millones a las comunidades. Aquellos que no puedan cumplir con estas demandas enfrentan la amenaza de ser obligados a abandonar sus hogares. Además, se identificaron cobros por actividades económicas realizadas por comerciantes y familias de estas regiones.
Tras la desarticulación del frente 26 de Marzo en el norte del departamento, nuevas agrupaciones han adoptado estas prácticas extorsivas, en algunos casos haciéndose pasar por disidencias armadas.
En el sur del Tolima, se alertó sobre la llegada de una nueva facción bajo las órdenes de un líder conocido como “Calarcá”, la cual está operando en los municipios de Roncesvalles, San Antonio y Rovira.
Las autoridades informaron que ya tienen conocimiento de los responsables y que están concentrando esfuerzos para contrarrestar su accionar. También hicieron un llamado a la comunidad para que denuncie cualquier caso de extorsión, garantizando absoluta reserva en las líneas de atención habilitadas: 147 del Ejército Nacional y 123 o 165 de la Policía Nacional.
Las campañas antiextorsión buscan fortalecer la confianza ciudadana y evitar que las comunidades sucumban ante estas amenazas, reafirmando el compromiso por garantizar la seguridad en las zonas afectadas.