
La gobernadora del Tolima, Adriana Magaly Matiz, reiteró su desacuerdo con el presidente Gustavo Petro al anunciar que la administración departamental no acatará el día cívico programado para el 18 de marzo. La medida, impulsada por el Gobierno Nacional y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), busca fomentar la participación en las marchas y respaldar la consulta popular promovida por el mandatario.
Matiz dejó clara su postura al señalar que la Gobernación del Tolima continuará operando con normalidad, ya que suspender labores representaría un gasto innecesario de más de 200 millones de pesos en costos fijos.
«No es parando como se consigue inversión social»
A través de su cuenta en X, la gobernadora expresó su respeto por el derecho a la protesta pacífica, pero enfatizó que su administración seguirá trabajando ese día.
«Respetamos y garantizamos el derecho a la protesta pacífica de los ciudadanos; sin embargo, la @gobertolima estará el martes 18 de marzo, trabajando, abierta y al servicio de los tolimenses», escribió.
En otro mensaje, Matiz insistió en la importancia de la disciplina y el uso eficiente de los recursos públicos.
«El país reclama trabajo serio, disciplinado y la búsqueda de mayores fuentes de recursos para mejorar la inversión social en pro de los más necesitados, y no es parando como se consigue. Quienes estamos hoy en lo público, desde el Gobierno, debemos aprovechar cada día y cada minuto laborando en servicio de los ciudadanos y buscando soluciones concretas a sus necesidades», agregó.
Con esta decisión, la mandataria departamental se distancia una vez más de las directrices del Gobierno Nacional, reafirmando su enfoque en la continuidad del trabajo y la administración de los recursos públicos.