Trabajadores de Unitrauma del Tolima, entre ellos médicos, auxiliares de enfermería, personal administrativo y otros colaboradores, han denunciado públicamente el retraso en el pago de sus salarios y cesantías, situación que se ha extendido por tres meses. En medio de la incertidumbre laboral, aseguran que la falta de recursos no solo afecta a sus familias, sino también la calidad de los servicios de salud ofrecidos en la institución.
Una trabajadora, que prefirió mantenerse en el anonimato por temor a represalias, describió la difícil situación que enfrentan:
«No nos dan el apoyo que requerimos. Muchos compañeros han sido despedidos por denunciar públicamente, y los administrativos no nos dan razón de nuestro dinero. En esta época de diciembre, es muy difícil cubrir nuestras obligaciones familiares y financieras. Esto es lo que justamente nos hemos ganado con nuestro trabajo diario.»
Además del impacto económico, la denunciante señaló que la falta de especialistas y personal suficiente está afectando gravemente la atención a los pacientes:
«Acá hay pacientes muy delicados de salud que llevan días esperando ser atendidos. Lentamente, la situación empeora porque no hay suficiente personal ni especialistas.»
A pesar de la gravedad de la situación, los empleados afirman sentirse amedrentados al intentar expresar su descontento. Según relataron, la administración no brinda respuestas claras y el temor a represalias los mantiene en silencio:
«No podemos decir nada porque nos deben dinero, y si denunciamos, nos demoran aún más el pago. Estamos viviendo con un solo sueldo en tres meses. Esto de verdad es muy preocupante.»
En un llamado desesperado, los trabajadores pidieron la intervención de las autoridades competentes para resolver esta crisis:
«Hacemos un llamado a medios como Ángeles Televisión para que nos ayuden a visibilizar esta situación. Trabajamos con amor y pasión por salvar vidas y mejorar la calidad de salud de los ibaguereños, pero sin los recursos para sostener a nuestras familias, es imposible continuar.»
La situación refleja una alarmante crisis en el sistema de salud de la región, afectando tanto a los trabajadores como a los pacientes. La falta de pagos, sumada a la precariedad laboral y la ausencia de personal especializado, requiere una respuesta urgente por parte de las autoridades locales y regionales.
Mientras tanto, los trabajadores de Unitrauma del Tolima continúan luchando por sus derechos en medio de la adversidad, con la esperanza de que sus voces sean escuchadas y se encuentren soluciones prontas y efectivas.