
En un operativo militar desarrollado en la vereda El Paraíso, en el municipio de Rovira, Tolima, murió alias Cancharino, cabecilla de finanzas del Bloque Jorge Suárez Briceño, una estructura disidente que delinque en varios departamentos del país. Su muerte se produjo en medio de un enfrentamiento entre tropas del Gaula Militar Tolima, adscritas a la Sexta Brigada del Ejército, e integrantes de la Estructura Joaquín González, facción del grupo armado.
Alias Cancharino, por quien las autoridades ofrecían una recompensa de 300 millones de pesos, era el encargado de recaudar los ingresos producto de extorsiones, secuestros y narcotráfico en los departamentos de Huila, Meta, Caquetá, Tolima, Putumayo y Vaupés. Además, tenía la misión de consolidar el Frente Joaquín González en el Tolima, con el objetivo de ampliar el control criminal sobre sectores estratégicos como el comercio, el transporte y la agricultura en municipios como San Antonio, Roncesvalles, Rovira y Cajamarca.
En el mismo operativo murió otro integrante del grupo armado y un tercero fue capturado. También se incautaron dos pistolas, dos granadas IM26, munición de diferentes calibres y un dron, material que quedó a disposición de las autoridades competentes.
Alias Cancharino tenía un largo historial delictivo. Inició su actividad en 2018 dentro de la comisión de finanzas de la Estructura 62, bajo el mando de alias Humberto Mora. Con el tiempo, fue escalando dentro de la organización, hasta asumir el rol de cabecilla financiero del Bloque Jorge Suárez Briceño en 2023. En su contra pesaban órdenes de captura por concierto para delinquir agravado, extorsión y tráfico de armas.
Las autoridades consideran que esta baja representa un golpe significativo contra la estructura financiera del grupo armado, debilitando su capacidad operativa en la región y mitigando el riesgo de expansión en el Tolima.