
En una escalada de presión contra el régimen de Nicolás Maduro, el gobierno de Estados Unidos ha incrementado la recompensa ofrecida por información que conduzca a la captura de Maduro y de Diosdado Cabello, el segundo al mando en el régimen, a 25 millones de dólares. Esta medida se anunció poco después de que Maduro se juramentara como presidente de Venezuela, en un acto que ha sido ampliamente criticado por la comunidad internacional como ilegítimo.
El Departamento de Estado de Estados Unidos calificó la acción como parte de un esfuerzo más amplio para llevar a los responsables de crímenes y corrupción en Venezuela ante la justicia. La recompensa por Maduro ya estaba en 15 millones de dólares, y el aumento a 25 millones representa el compromiso de Estados Unidos de continuar con la presión internacional para restaurar la democracia en el país sudamericano.
Junto con el aumento de la recompensa, Estados Unidos también implementó un paquete de sanciones severas que incluye restricciones de visas para Maduro y varios miembros de su gobierno. Estas sanciones buscan aislar aún más al régimen, limitando su capacidad de operar a nivel internacional y castigando a quienes se beneficien del sistema corrupto establecido por Maduro.
Estas acciones refuerzan la postura de Estados Unidos en apoyo al pueblo venezolano y su lucha por recuperar la democracia y los derechos humanos en su país.




