
La Corte Constitucional de Colombia falló a favor de Emiliana Castrillón Jaramillo, una deportista transgénero que había sido excluida de la Liga Antioqueña de Voleibol femenino por su identidad de género.
En 2024, la Liga notificó oficialmente a Emiliana que no podría participar en la categoría femenina, argumentando que “para competir en una rama, se debe tener la condición de género correspondiente al sexo con el que se nació”. La decisión generó una amplia controversia en el ámbito deportivo y de derechos humanos.
El 1 de octubre de 2025, la Corte Constitucional ordenó a la Liga modificar su reglamento deportivo, eliminando cualquier norma que excluya a deportistas por la condición de género asignada al nacer. El fallo señala que no existen pruebas científicas que justifiquen una exclusión basada en el sexo biológico y que este tipo de prácticas violan la igualdad de oportunidades.
Emiliana celebró la decisión y aseguró que su rendimiento no depende de su identidad de género:
“Yo entreno todos los días y por eso mi alto rendimiento, no es por el hecho de haber nacido hombre que juegue mejor.”
El pronunciamiento de la Corte marca un precedente en materia de inclusión deportiva en el país y abre la puerta a una discusión más amplia sobre los derechos de las personas trans en el ámbito competitivo




